Una noche, en la que suelo oir gritos y gritos de mis padres pelear, no soporto ya sus gritos.
Hablan de cosas y cosas que prefiero no entender, pero que a mi edad me corresponde saber.
Lo único que deseo y espero, es que dejen de gritar, pues aquel sonido intermitente no me deja dormir en paz...
Sabril Winston Haider
No hay comentarios.:
Publicar un comentario