Había una vez una princesa hermosa que siempre paseaba por el jardín de su castillo. Hubo un día, que se encontró con un hermoso sapo. Éste le sonrió y le dijo:
-Si me besas, ya no seras más una princesa solitaria- La princesa lo observó por unos momentos, y pensó que éste podría convertirse en un príncipe. Asi que lo tomó, y le dió un tierno beso en su cabeza. De repente, la princesa se convierte en sapo. Ésta sorprendida mira al sapo, le sonríe y le dice:
-Los resultados fueron mejor de lo que esperaba.
Ambos sapos se fueron saltando por el mar.
Sabril Winston Haider
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