Voces perturbadoras

Siento como me invade la pena, la rabia y la impotencia de no poder ser lo que deseas, estuve a un paso de lograr lo que quería…pero sin embargo, las cosas no resultaron. Maldita sensación de miseria, de angustia, que invade y retuerce mi corazón en pedazos, que hace sentir a mi mente idiota…y otra vez esas voces me perturban, me susurran y me hacen recordar lo miserable e inútil que soy como persona “Basta ya idiota…deja de creer lo que no eres…basta ya imbécil, no eres más que una simple persona, nadie te ayudará…los demás son tus enemigos, no puedes confiar en nadie...ni en tus amigos, ni en tu pareja, ni en nadie…” ¡BASTA! ¡DEJEN DE MOLESTARME! Y cuando había dado todo por perdido, recibo la llamada de mi hermosa chica, la única voz dulce que deseo escuchar…y me dice “todo estará bien, tranquila amor, nada malo pasará mientras esté a tu lado”.

Sabril Winston Haider

El retrato del amor (Versión 2)

Cuando estoy aburrida, suelo ir al parque a leer un libro, me hace pensar que no estoy del todo sola, en especial cuando a ratos, sin que me descubra, observo a una pequeña chica de ojos oscuros, de cabello café corto y ondulado. Lo que ella de seguro no sabe, es que al leer, imagino que la conozco, y está dibujando un retrato de mí.

Hubo un día, que estuve dispuesta a hablarle, pero como no quería pasar como acosadora, decidí hacerlo en su idioma, así que me senté bajo el árbol como de costumbre totalmente quieta, esperando que pudiera dibujarme. Pasó un buen rato y me di cuenta, que me estaba observando muy concentrada, al parecer había logrado mi objetivo, ella me estaba dibujando, pude captar su total atención en mí.

No sabía con exactitud si me estaba dibujando o no, así que estaré atenta a sus movimientos, y cuando vea que ha ya terminado de dibujar, iré hacia donde ella con el interés de ver que ha dibujado.

Finalmente decido acercarme, porque al parecer ya había terminado de dibujar, me acerco a ella lentamente, le sonrío dulcemente y ella me mira ruborizada:

-¿Podrías hacer otro dibujo mío pero junto a ti la próxima vez?- Dije muy segura, ella me observa sorprendida por unos segundos y luego asiente dejando escapar una hermosa sonrisa de su rostro.

Sabril Winston Haider

El Retrato del amor

Nunca había visto tal belleza, tenía un aspecto agresivo y despiadado, pero sabía que en el fondo de su corazón había dulzura. Solía sentarse a leer libros a la sombra de un viejo árbol, y por mi parte, me dedicaba a dibujar cosas básicas del parque. Pero mi mayor deseo era hacer un retrato de ella, siempre me quedo observándola por unos minutos antes de comenzar a dibujar algo, es como si me inspirara de alguna forma. 

Fui al parque con mi croquera y lápices como de costumbre, me senté en una banca y allí estaba otra vez, pero tenía un aspecto diferente, en ésta ocasión, no llevaba ningún libro en su poder, al parecer solo estaba descansando. Al verla así pensé “¡Esta es mi oportunidad para poder dibujarla!” Sin embargo, no sabía por cuanto tiempo estaría descansando allí. “¡Qué más da! ¡Lo haré igual!” dije para mí en voz baja y comencé rápidamente a dibujarla sin que se diera cuenta. Comencé por su largo cabello negro y liso, después seguí con su cara, y sus ojos azules que destacaban con la sombra del árbol.

Ella seguía totalmente quieta, era extraño, es como si estuviera diciéndome algo, o como si quisiera que la dibujara, no tenía como averiguarlo, por ende, cuando terminara el dibujo, me armaría de valor para poder hablarle.  

Dejo escapar un leve suspiro, y después de un par de horas, por fin había terminado de dibujarla, sinceramente, creo que era uno de mis mejores dibujos. En ese momento, me di cuenta que me miró fijamente, yo me ruboricé por completo, ella me responde con una dulce sonrisa, y al rato después se acerca de forma tranquila y alegre. Estábamos frente a frente, yo sin saber nada que decir y ella con una hermosa sonrisa en su rostro

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-¿Podrías hacer otro dibujo mío pero junto a ti la próxima vez?- Dijo en un tono dulce, la observé sorprendida por unos segundos y luego asiento dejando escapar una gran sonrisa, efectivamente ella se había dado cuenta que la estaba dibujando. 

Sabril Winston Haider

Autoestima (Versión femenina)

“No puedo…simplemente no puedo quitarme aquello de mi cabeza….hasta el día de hoy me perturba…y pensar qué….podría haber sido algo tan lindo…pero no fue….”

“…Más que una simple ilusión…”

Estaba ensimismada en mis pensamientos, cuando de repente oigo al profesor decir que la clase ya había terminado. Me retiré en silencio de la sala, camino hacia la biblioteca para buscar el nuevo libro que habían pedido para la próxima cátedra de Gramática I. En ese entonces, oigo una voz que me llama…

-¡Hey Karim!-

-¿Qué sucede Nina?- Dije mirándola a los ojos fijamente, al hacerlo presentí un leve calor en ellos ¿Qué sería ésta extraña sensación?

-N-no es nada…y-yo solo quería…ver si podías ir a la biblioteca c-conmigo- Dijo Nina nerviosa

-¿Quieres ir conmigo?- Dije en tono dudoso

-¡Claro! Pero si no puedes no importa…puedo ir sola- Dijo Nina retirándose

-¡Espera Nina!- Grité desesperada. Nina se detuvo y voltea a mirarme, la miré a los ojos de forma tranquila y le contesté…

“Vamos juntas Nina”

En el camino, fuimos conversando cosas triviales y sin importancia. No obstante, al llegar a la biblioteca, ambas nos quedamos mirando a los ojos fijamente por unos minutos en silencio…

¡Vamos!- Dijimos las dos al mismo tiempo y cogimos la manilla de la puerta, nuestras manos sintieron un primer contacto  paralizador y tranquilo a la vez…

-Lo siento Nina, no fue mi intención- Dije retirando la mano

-D-descuida Karim…estoy bien- Dijo Nina con un tono nerviosa

Al entrar a la biblioteca, nos dedicamos a buscar el libro, no obstante…no podía quitarme el momento incómodo con Nina…su mano se sentía sumamente cálida, desprendía una fuerza y frescura inexplicable…un tanto parecida a la de aquella chica…

-¡Karim! ¡He encontrado dos copias del libro!- Dijo de forma alegre mostrándome ambos libros

-Oh que bien…pues ve a pedirlos- Dije sonriéndole, ella me respondió de la misma forma y fue a la recepción a pedir el libro. Mientras tanto yo continuaba observando los libros de la biblioteca, quería ver si podía encontrar algo con qué entretenerme, en ese entonces llega Nina...

-¡Listo Karim! ¡Ya he pedido los libros!-

-Gracias- Dije sonriendo

-Ammm disculpa- Dijo Nina un tanto nerviosa

-¿Qué sucede?- Dije preocupada

-¿Te importaría acompañarme un rato? No me gusta leer sola- Dijo Nina mirándome dulcemente a los ojos

-¿Eh? ¡Pues Claro!- Dije sonriendo.

Cogí cualquier libro de la estantería, y luego me senté en uno de los sillones a escribir, Nina por el contrario, se sentó a mi lado pero a leer. Pasaron largas horas, yo seguía escribiendo y Nina seguía leyendo, ambas envueltas en nuestros mundos, no obstante, hubo un momento en el que quedamos mirándonos fijamente a los ojos, se sentía un intenso calor y a la vez por toda mi piel, sentía un escalofrío…no quería qué aquella historia se volviera a repetir…

-Karim…- Dijo Nina con un tono nervioso

-¿Qué deseas Nina?-

-Pues…emmm….como explicarlo-

-Con palabras- Dije sonriendo

-Muy graciosa- Dijo ruborizada

-Solo fue una broma, lo siento-

-¡Me gustas!-

-¿Eh?-

-Karim…¡Te amo!-

Al escuchar esas palabras, sentí un enorme escalofrío por toda mi piel, y al mismo tiempo un deseo por querer besar aquellos labios por los cuales habían salido esas hermosas palabras…quería acercarme…quería sentir la esencia de aquella hermosa y dulce chica…pero algo me impedía a hacerlo…no lograba saber qué era…simplemente no podía acercarme…

-No es cierto…- Dije molesta

-¡No es broma Karim! ¡Es en serio! ¡Desde la primera vez qué te vi siempre me has gustado!- Dijo Nina totalmente ruborizada

Quiero acercarme a ti….quiero acariciar esa hermosa y suave piel, besar aquellos labios tan cautivadores y sensibles…pero al recordar aquel pasado oscuro….me llene de lágrimas y me oculté detrás de un libro fingiendo que leía. En ese entonces, Nina toma una de mis manos, y me mira dulcemente a los ojos…como si no hubiera mañana

-Te amo Karim- Dijo Nina ruborizada…en ese entonces, rodee su espalda baja con uno de mis brazos atrayéndola a mí, para así poder besar lentamente sus labios…

-Yo también te amo Nina- Dije mirándola dulcemente,  lo abracé y continué besando aquellos labios. Millones de sensaciones se venían a mi mente… ¿Esto era real? ¿No era un juego ésta vez? Después de un rato me detuve, Nina se acurrucó a mi pecho, y yo la abracé con ternura rodeando su cintura con mis brazos.

-¿Por qué no me creíste antes?- Dijo Nina

-Sigo sin creerlo-

-¿Por qué?-

-Parece un sueño hecho realidad-

-Pero soy Real Karim…¡Soy real!-

-Lo sé…a diferencia de ella…si lo eres-

-¿De ella?-

-Hace mucho tiempo, había una chica un año mayor que yo que me gustaba mucho, se me declaró y correspondí sus sentimientos, pasó el tiempo y llegó el día en que tuvimos relaciones sexuales, pero al siguiente día… Confesó que en realidad, quería probar como era tener sexo con una mujer, yo le daba asco…y dijo que era totalmente horrible, que ningún chico o chica se atrevería a acercarse a mí…y que además, por mi líbido sexual tan alto y brusco, terminaría lastimando a las demás personas…es por eso que crecí alejada de las personas y un tanto sola…crecí con aquella idea…soy un asco de persona- Dije con un tono de voz triste

-Para mí eres hermosa, no eres un asco de persona…no solo físicamente eres hermosa...tú corazón es totalmente puro y noble- Dijo Nina sonriendo y acariciando una de sus mejillas

-Muchas gracias Nina, creo…que gracias a ti he vuelto a confiar en mí misma- Dije con un tono de voz firme y beso los labios de la chica dulcemente.

Desde aquel día, nos fuimos conociendo un poco mejor, terminamos siendo amantes. Un día antes de una prueba de cátedra, decidimos ir a su casa a estudiar por la noche, para mi buena suerte, estuve a solas junto a ella…y pues…nos dedicamos a estudiar…pero también aquella noche…fue nuestra primera vez… si bien ella no fue mi primera chica…fue la primera vez de ambas que hacíamos el amor.

Fin 

Sabril Winston Haider

Autoestima

“No puedo…simplemente no puedo quitarme aquello de mi cabeza….hasta el día de hoy me perturba…y pensar qué….podría haber sido algo tan lindo…pero no  fue….”

“…Más que una simple ilusión…”

Estaba ensimismado en mis pensamientos, cuando de repente oigo al profesor decir que la clase ya había terminado. Me retiré en silencio de la sala, camino hacia la biblioteca para buscar el nuevo libro que habían pedido para la próxima cátedra de Gramática I. De repente, oigo una voz que me llama…

-¡Hey Darken!-

-¿Qué sucede Ere?- Dije mirándolo a los ojos fijamente

-N-no es nada…yo solo quería preguntarte si querías acompañarme a la biblioteca a buscar el libro-

-¿Quieres ir conmigo?- Dije en tono nervioso

-¡Claro! Pero si no puedes, no importa- Dijo Ere retirándose, sujeté fuertemente su mano, lo miré a los ojos de forma tranquila y contesté…

“Vamos juntos”

En el camino, fuimos conversando cosas triviales y sin importancia. No obstante, al llegar a la biblioteca, ambos quedamos mirando la puerta fijamente por unos minutos en silencio…

¡Vamos!- Dijimos los dos al mismo tiempo y cogimos la manilla de la puerta, nuestras manos se encontraron…

-Lo siento Ere, no fue mi intención- Dije retirando la mano nervioso

-D-descuida Darken…estoy bien- Dijo Ere mirándome un tanto ruborizado

Al entrar a la biblioteca, nos dedicamos a buscar el libro, no obstante…no podía quitarme el momento incómodo con Ere… su mano se sentía sumamente cálida…como la de aquel muchacho…

-¡Darken! He encontrado dos copias del libro!-

-Oh que bien…pues ve a pedirlos- Dije sonriéndole, él me respondió de la misma forma y fue a la recepción a pedir el libro. Mientras tanto yo continuaba observando los libros de la biblioteca, quería ver si podía encontrar algo con qué entretenerme.

-¡Listo Darken! ¡Ya he pedido los libros!-

-Gracias…mmm… ¿Te importaría acompañarme un rato? No me gusta leer solo-

-¿Eh? ¡P-pues Claro!- Dijo Ere sonriendo.

Cogí un libro de la estantería, y luego me senté en uno de los sillones a leer, Ere por el contrario, se sentó a mi lado pero a escribir. Pasaron largas horas, yo seguía leyendo y Ere seguía escribiendo, ambos absorbidos en nuestros mundos, no obstante, hubo un momento en el que ambos quedamos mirándonos fijamente. Se sentía un intenso calor, y a la vez por toda mi piel, sentía un escalofrío…no quería qué aquella historia se volviera a repetir…

-Darken, necesito…decirte algo- Dijo Ere con un tono nervioso

-¿Qué deseas Ere?-

-Pues…emmm….como explicarlo-

-Con palabras- Dije sonriendo

-Muy gracioso- Dijo ruborizado

-Solo fue una broma, lo siento-

-¡Me gustas!-

-¿Eh?-

-Darken…¡Te amo!-

Al escuchar esas palabras, sentí un enorme escalofrío por toda mi piel, y al mismo tiempo un deseo por querer besar aquellos labios por las cuales habían salido esas hermosas palabras…quería acercarme…quería sentir su olor…pero algo me impedía hacerlo…

-No juegues conmigo…- Dije molesto

-¡No es broma Darken! ¡Es en serio! ¡Desde que somos compañeros de primer año me has gustado!- Dijo Ere con un tono de voz entre nervioso y seguro

Quiero acercarme a ti….quería acariciar aquella piel suave, besar aquellos labios tan cautivadores…pero al recordar aquellas cosas….me llene de lágrimas y me oculté con unos lentos oscuros. En ese entonces, Ere toma una de mis manos, y me mira dulcemente a los ojos…

-Te amo Darken- Dijo Ere ruborizado…rodee su espalda, bajé con uno de mis brazos atrayéndolo a mí, para así poder besar lentamente sus labios…

-Yo también te amo Ere- Dije mirándolo seriamente,  lo abracé y continué besando aquellos labios. Miles de sensaciones se venían a mi mente… ¿Esto era real? ¿No era un juego ésta vez? Después de un rato me detuve. Ere se acurrucó en mi hombro, mientras que yo lo abracé por la espalda.

-¿Por qué no me creíste antes?- Dijo Ere

-Sigo sin creerlo-

-¿Por qué?-

-Parece un sueño hecho realidad-

-Pero soy Real Darken…¡Soy real!-

-Lo sé…a diferencia de él…si lo eres-

-¿De él?-

-Hace mucho tiempo, había un chico un año menor que yo que me gustaba mucho, se me declaró y correspondí sus sentimientos, pasó el tiempo y llegó el día en que tuvimos relaciones sexuales, pero al siguiente día. Confesó que en realidad, quería probar como era tener sexo con un hombre, yo le daba asco…y dijo que era totalmente horrible, que ningún chico o chica se atrevería a acercarme a mí…y que además, por mi líbido tan alto y brusco, terminaría lastimando a las demás personas.

Es por eso que crecí alejado de las personas y un tanto solo…crecí con aquella idea…soy un asco de persona- Dije con un tono de voz triste

-Para mí eres hermoso, no eres un asco de persona…no solo físicamente eres hermoso...tú corazón es totalmente puro y noble- Dijo Ere sonriendo

-Muchas gracias Ere-

Desde aquel día, nos fuimos conociendo mejor, y terminamos siendo amantes. Un día antes de una prueba de cátedra, decidimos ir a mi casa a estudiar por la noche, para mi buena suerte, estuve a solas junto a él…y pues…nos dedicamos a estudiar…pero también aquella noche…fue nuestra primera vez…si bien él no fue mi primer chico, y yo tampoco él de él….fue la primera vez de ambos que hacíamos el amor.

Fin

Sabril Winston Haider

Miedo V/S Yo

-No soy nada para ella ni para nadie…no tengo a donde ir, estoy sola en éste mundo ¿Cómo podría alguien llegar a querer a un ser insignificante, miserable y cruel como yo? Es imposible…

-Es cierto…nadie podría llegar a querer a un asesino o la despiadada persona que eres realmente en tu interior, tan solo mírate…intentando luchar por alguien que ni si quiera conoces en la realidad ¿Qué pasa si solo está jugando contigo? A través del internet se pueden inventar o simular muchas cosas…en especial si son escritas….si alguien se maneja en el mundo literario, perfectamente se puede crear un mundo imaginario….pensé que eras idiota…pero ahora veo que eres patético y estúpido…

-Ya lo sé…no valgo la pena, es por eso que sé y creo que debería estar solo, así no le haría daño a nadie

-Eso es… ¡Perfecto! Por fin piensas de forma inteligente Rafael, no eres más que un monstruo, un demonio…que solo posee sentimientos de oscuridad en su alma, pero qué están siendo parchados por los sentimientos de luz de esa chica…pero no son más que una simple ilusión, tarde o temprano te dejará…por algo te mintió

-Pero… ¿Y si me mintió porque no quería dañarme? Si me lo decía…probablemente estaría más asustada de lo que ya estaba

-No seas tonto…ella mismo lo dijo, valora muy poco tu ayuda…en realidad, no la valora en nada, por algo le dio igual mentirte,  ella tan solo sigue a tu lado porque fuiste tú quién se lo pidió…acéptalo Rafael, ella en realidad no te quiere, solo está jugando contigo nada más

-¡No lo creo! Yo sé que siente cosas por mí…por algo me ha dicho todas esas cosas bellas, de que no quiere dejarme, o que no quiere olvidarme…¡Yo sé que es amor verdadero!

-Si realmente te quisiera…no se habría dejado dominar por su miedo aquella vez, te hubiera defendido a pesar de todo…pero no…ella prefirió proteger a su familia y velar por su bien…no solamente es una cobarde que no te quiere, es una egoísta que solo está pensando en sus sentimientos y no está pensando en lo que puedes estar sintiendo tú

-Ella va a su paso….todos nos dejamos dominar por nuestros miedos en algún momento….además, estos sentimientos que ella siente ahora son totalmente nuevos, y no los había experimentado antes….es normal que no sepa como enfrentar la situación

-Sigues siendo tan ingenua…olvídate de ella…conseguirá a alguien mejor que tú, deja de lado lo que alguna vez sentiste por ella o lo que alguna vez te hizo sentir, o cosas hermosas que dijo…solo fueron palabras vacías…¿Por qué no te quedas a mi lado? Siempre he estado a tu lado, yo nunca te abandonaré…

-El quedarme contigo sería derrotarme y asumir no hay solución a los problemas que tengo hacia mí misma, no te quiero a mi lado, no eres alguien digno ¡Vete ya!

-Como quieras…pero te lo advertí….de esa relación nadie bueno pasará…

Y es así, como Rafael a pesar de todo, pudo enfrentar al miedo y terminó derrotándolo, a pesar de todos sus sentimientos negativos….

Sabril Winston Haider

Apoyo demente

Me acerqué lentamente a ti, era la única forma de saber que te ocurría, después de todo siempre estás reprimiendo tus emociones, fingiendo que todo estará bien y malo volverá a pasar, pero en el fondo de tu corazón sabes que te mueres de dolor, y al verte así me hierve la sangre por no poder hacer nada por ver aquella sonrisa radiante de siempre.

-¿Qué ocurre? Estás muy pálido ¿Te sientes bien?- Te dije preocupado, acariciándote con ternura tu cabello.

-No pasa nada….he estudiado mucho últimamente, quizás por eso me observas en un estado tan deplorable y ausente- Me dijiste con un tono de voz desganado.

-¿De verdad? Pues a mí me parece que has estado llorando por largas horas, puedo observar tus ojos y reflejan aquel dolor ¿Qué es lo que te abruma querido?- Te dije, mirándote fijamente de forma muy seria.

-¡YA TE DIJE QUE NO ES NADA!- Me gritaste, y huiste lejos del laboratorio, seguí tus pasos para poder alcanzarte, necesitaba saber que te ocurría e intentar hacer algo para volver aquella sonrisa de tu hermoso rostro una vez. Después de un par de minutos de perseguirte, pude sostener tu mano y por un instinto impulsivo te arrinconé a la pared.

-¿QUÉ TE OCURRE?- Te grité molesto, y sin pensarlo besé tus labios y tu cuello desesperado, creyendo que de alguna forma podría absorber tu tristeza y saber que te ocurría.

-Gracias a ese beso, he podido sentir tu apoyo demente- Me miraste dulcemente y me abrazaste.

Sabril Winston Haider

 

Oda al perro

Oh bello perro de parir

Que nos haces vivir

Oh gran amigo que nos hace sentir

Danos tu fe y tu reír

De la noche al cielo

Te vemos y reímos

Yo me voy al canelo

Y te busco a remos

Sabril Winston Haider

Infancia ¿Dura o blanda?

Los adultos muchas veces se quejan, de que los niños de hoy en día, son incontrolables, qué no se conforman con nada y qué cada vez son más dependientes de la tecnología. Una vez escuché a un padre decir “Yo tuve una infancia dura, y esto fue lo que me enseñó a vivir, y por eso yo haré lo mismo con mis hijos” ¿En serio lo harás? Señor padre, usted está muy equivocado al pensar así, por no considerar las siguientes cosas:

1.       Contexto vivencial: Para empezar, en su época de infancia, la tecnología no estaba tan masificada como hoy en día, los niños salían a jugar y se divertían imaginando y creando cosas, a lo más podían ver televisión. Hoy en día, la tecnología está tan inserta en nuestras casas, qué prácticamente dependemos de ella para vivir. Cuando uno era niño, quería el juguete más caro, mientras que hoy, el niño quiere el mejor videojuego del play 4 o la Tablet.

2.       Profesores mediocres: Así es, profesores, antiguamente los profesores no tenían los suficientes recursos para enseñar los contenidos básicos de aprendizaje, y es así, como ellos a su vez tenían un poco más de autoridad y al mismo tiempo la disposición de QUERER enseñar. Y en el caso, de que no pudieran enseñar todo lo que debían, se mandaba tarea para la casa para que uno lo averiguara. Actualmente, son los mismos profesores, que enseñan a través de diapositivas, diciendo tranquilamente “No se encarguen de escribir, si voy a mandar al PPT, por ahora escúchenme” esto produce en los alumnos de forma automática, que se relajen y no presten nada de atención, pensando “Si va a mandar el PPT, entonces lo leo después y ahora hago otra cosa” Y sinceramente, esto rara vez pasa. Al final, algunos llegan a casa solo a ver las redes sociales y se olvidan de lo que vieron en la escuela y/o universidad.

3.       Tecnología mal utilizada: Antiguamente, el internet, los celulares, computadores, etc. Era cosa de pocos, y el que lo tenía era especial. Al mismo tiempo, los que podían acceder a él, lo usaban para aprender o jugar algún juego divertido. Lamentablemente hoy en día, los niños entran a internet solo para meterse a las redes sociales como Facebook, Instagram, entre otras (Lo que encuentro que es bizarro, ya que las redes sociales se hicieron principalmente para asuntos de trabajos y para personas mayores de edad).

4.       Personalidad desconocida: Definitivamente, todas las personas poseemos un carácter distinto, independiente de que podamos tener los mismos gustos, TODOS reaccionamos de distintas formas, tal vez para alguien que vivió en la antigua época (años 80-90) el que no le compraran un juguete que querían, o el que le prohibieran salir a jugar afuera, o incluso el ver televisión, era algo totalmente terrible. Mientras que hoy en día, el salir a jugar afuera o el ver televisión, ya es algo casi extinto, sin dejar de lado los juguetes, ahora los niños piden tablets o videojuegos electrónicos extremadamente violentos.

No me las quiero dar de experto en el tema, sólo quiero dar una opinión al respecto, ya que lamentablemente la infancia dura qué los adultos suelen decir que tuvieron, y que quieren dársela a sus hijos, créanme…el que ahora se obtenga todo tan “fácil” no es tener una infancia blanda, todo lo contrario, ya que los niños de hoy en día, no  están desarrollando su creatividad y su inteligencia, y cuando lleguen a adolescencia, habrá problemas de identidad, y al llegar a adultos, no tendrán las suficientes herramientas para enfrentarse a la vida.

En conclusión puedo decir, que en unos años más, ya no existirán niños, adolescentes y adultos. Sólo existirán adolescentes y adultos ¿Realmente estamos en un período de evolución o involución?

Sabril Winston Haider  

Identidad

-¿Quién soy yo?
-¿Quién eres tú?
-¿Quién es él?
-Nadie tiene la respuesta de nuestras identidades, ni de lo que somos o no somos.
-¿Por qué?- Me dijiste tú.
-Porque nadie está consciente, si en en nuestro diario vivir, es la realidad o es un sueño más, nada es 100% correcto hoy.
-¿Entonces las matemáticas no son exactas?
-No lo sé.

Sabril Winston Haider

El Barquito de Bou

Había una vez un gatito que le gustaba navegar por el mar en su barquito. Un día, su dueña se fue de la casa; Bou, totalmente desconcertado no sabía lo que estaba ocurriendo, asi que decidió ir a buscarla. Y desde ese día, éste gatito navega por los mares, en busca de su dueña. Asi que cuando vean un barco y en él vean un gatito blanco, se trata de Bou, que espera con ansias el rencuentro de su dueña Jessica. 

Sabril Winston Haider